Regina King ha sido actriz por más de tres décadas, pero sus papeles más recientes en dramas que examinan el racismo y el mundo afroamericano en Estados Unidos la han catapultado hasta la cima de su carrera con un Óscar.
King, de 48 años y nominada por primera vez, se llevó el domingo un premio de la Academia por su emotiva actuación como una madre que defiende al novio de su hija, acusado injustamente de violación, en la película «If Beale Street Could Talk».
Regina King, nominada por «If Beale Street Could Talk», recibe el Óscar a mejor actriz de reparto, el 24 de febrero de 2019 en el Dolby Theatre de Hollywood, California
«Estar aquí representando a uno de los artistas más grandiosos de nuestro tiempo, James Baldwin, es un poco surrealista», dijo King sobre el autor de la novela que Barry Jenkins adaptó y llevó al cine.
La película de Barry Jenkins («Moonlight») es una adaptación de la novela de James Baldwin sobre una pareja joven, Tish y Fonny, cuyas vidas se ven desgarradas por las acusaciones contra Fonny.
La actuación de King como la madre de Tish fue ampliamente aclamada y obtuvo un Globo de Oro en enero por su trabajo.
Jenkins dijo que quería a King para el papel porque ella podría interpretar a una madre que «no es una supermujer, pero que cuando tiene que serlo, lo es».
La actriz casi no llega a los Óscar. Hace 10 días, King casi es arrollada en su asiento en la cancha en el Madison Square Garden durante un juego de los Knicks cuando la estrella Joel Embiid, saltó hacia la multitud.
El video del incidente se hizo viral. King tuiteó: «Gracias a Dios y @JoelEmbiid por tus habilidades atléticas. Crisis evitada».
– Triple ganadora del Emmy –
King nació y creció en Los Ángeles el 15 de enero de 1971. Su madre era una maestra de educación especial y su padre un electricista. Asistió a la Universidad del Sur de California.
Pero su carrera como actriz comenzó cuando todavía era una adolescente, con un papel en la comedia «227», que mantendría hasta el fin de la serie en 1990.
El año siguiente, debutó en la gran pantalla con un papel en el drama de John Singleton «Los dueños de la calle», ambientada en Los Ángeles.
Apareció en otras dos películas del director John Singleton, «Poetic Justice» y «Higher Learning», antes de su siguiente gran oportunidad: interpretar a la esposa de Cuba Gooding Jr en el gran éxito de Tom Cruise, «Jerry Maguire» (1996).
Aunque su carrera en la gran pantalla continuó prosperando, con papeles junto a Will Smith en «Enemigo Público» y Jamie Foxx en «Ray» como la cantante Margie Hendricks, King volvió a la televisión.
¿La razón? Que su pequeño hijo Ian pudiera tener una buena crianza.
«Mis representantes decían, ‘¿estás segura de esto?'», dijo King al periódico Los Angeles Times antes de los Óscar. «Estaba segura. Y terminó siendo una bendición en todos los sentidos».
Después de tener un papel recurrente en el largo thriller de espionaje «24», como la hermana del presidente, King actuó como detective en el bien recibido drama policial «Southland» sobre el Departamento de Policía de Los Ángeles, que duró cinco temporadas.
Y después llegaron los Emmys.
King ganó tres en un espacio de tres años. Dos de ellos fueron por su papel en «American Crime», una serie que explora temas de raza, discriminación e inmigración.
Ganó el tercero por su interpretación de una madre en duelo en la miniserie de Netflix «Seven Seconds», sobre las tensiones raciales en Nueva Jersey después de que un adolescente negro fuera herido por un policía blanco.
King también ha trabajado como directora, más recientemente en episodios de las series «This Is Us», «Scandal» y «The Good Doctor».
En la noche de los Globos de Oro, hizo un extraordinario discurso a favor de la igualdad de género en Hollywood.
«En los próximos dos años… haré una promesa, y va a ser dura, para asegurarme de que todo lo que produzco tenga un 50% de mujeres», dijo King.
Sus próximos proyectos de actuación incluyen la súper secreta adaptación de «Watchmen» de HBO, una versión actual de la oscura novela gráfica de culto de 1980 sobre superhéroes jubilados convertidos en vigilantes enmascarados.
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